CUENTOS DE LOS OCÉANOS
TOPOGRÁFICOS
En el otoño de 1973 la banda de rock Yes editó una obra de cuatro temas en un álbum doble, a canción por cara en aquellos discos de vinilo de entonces. La idea le surgió al cantante Jon Anderson cuando leía la Autobiografía de un Yogui, de Paramhansa Yogananda. Había una extensa nota aclaratoria al pie de una página describiendo cuatro partes sánscritas que cubren todas los aspectos de la religión, vida social, así como campos de la medicina y la arquitectura. Jon que deseaba realizar un trabajo musical a gran escala consiguió dar forma a aquella idea construyendo cuatro canciones de largo desarrollo instrumental y vocal, y gracias sobretodo al apoyo del guitarrista Steve Howe. Cuando el resultado se empezó a oír, la prensa arremetió contra la obra conceptual tildándola de ostentosa y aburrida. Aquello tal vez tenga una explicación. La obra exige una audición atenta, o al menos varias escuchas antes de captar la intrincada expresión musical que encierra. Los periodistas, en su prisa por presentar la novedad al público, erraron sus criterios. El tiempo que todo lo corrige ha dado la razón a la banda, sus fans así lo reconocen, y yo soy uno de ellos. He escuchado esta obra con cierta regularidad durante más de 30 años sin aburrirme un ápice. Cada tema ronda los 20 minutos. Mis preferidos son "La Ciencia Reveladora de Dios" y "Ritual", perfectos en su balance de armonías y un original desarrollo. Pero toda la obra en general manifiesta una fantasía evocadora de civilizaciones perdidas cuya sabiduría olvidada descansa en enigmas poéticos y filosóficos. Sus letras son difíciles de entender y recuerdan un tanto a las definiciones del oráculo I-Ching, en el que cada cual da respuesta a sus misterios cuando se le consulta.
Amanecer de la luz yacente entre un silencio
y orígenes vendidos,
Capturada entre fusiones de maravilla en momentos
apenas olvidados,
Coloreada en pastizales casuales de hojas danzantes que lanzan destellos de
cambio,
Entretenidas pero serias al pensar huimos del mar entero.
Amanecer del pensamiento que a través de instantes diarios rebusca
bajo la tierra
Revelando trayectorias de tiempo provocando
recuerdos inconexos pero con propósito
Ansiadas indagaciones que brindan vínculos de
auto instrucción
Afilado y tierno amor mientas nos alzamos al
aire, una imagen de la distancia.
que bien exponer esta obra ! hace refleionar adentro afuera abajo arriba. listo . hoy tengo un dia ganado.saludos desde argentina.
ResponderEliminarGracias a ti, Alberto. Es bueno saber que alguno mira el blog de vez en cuando y deja algún mensaje. Ya sé que Yes tiene muchos admiradores por Argentina y Chile.
Eliminarcada vez que escucho el disco me sorprende aun mas...es música soberbia y grandiosa
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