viernes, 13 de enero de 2012

John Keats  (1795 - 1821)

Tiene la pose de John Keats, en el retrato de Milton, el semblante de quien parece estar en la higuera, como cuando un alumno en la escuela desatiende al profesor y estuviese pensando en cualquier cosa. Pero seguramente para Keats cualquier cosa sería alguna ensoñación poética. Si le preguntaran de repente ¿En qué piensas? Seguro que no contestaría. Su ensoñación quedaría más tarde impresa en alguno de sus poemas y, con toda certeza, estaría engalanado de  alguna imagen mirífica, de alguna bella imagen entre las muchas que ofrece la Naturaleza. Así lo dice al empezar Endimión, "A Beauty is a joy for ever" "La Belleza es un goce sempiterno" y así lo dice al final de su Oda a una Urna Griega "La Belleza es Verdad - Y verdad la Belleza. Eso es todo lo que aprendes en la tierra y todo lo que necesitas saber".



Dice del Otoño:
"....Tú también tienes tu música,
mientras nubes ligeras florecen en el ocaso,
y tiñen de rosa pálido las llanuras;
y un coro de lamentos entonan los insectos
entre los sauces del rio, y se alejan
o se hunden en el viento suave que nace o muere;
y los corderos adultos balan ruidosos desde las colinas;
cantan las cigarras, y con voz atiplada
el petirrojo silba desde el jardín en flor;
y golondrinas en bandadas revolotean en el cielo"