viernes, 24 de mayo de 2013


"Despleguemos las velas del conocimiento verdadero y exploremos los secretos de la naturaleza dados hasta ahora minuciosamente " - Oldenburg

CORRESPONDENCIA
SPINOZA

Una de las mejores formas de entrar en la espesa filosofía de Spinoza es leer su correspondencia. Una serie de cartas en las que conocidos intelectuales y amigos le pedían explicaciones más claras acerca de sus polémicos escritos sobre Dios, (de lo que él creía que Dios era, muy distante de las hasta entonces creencias religiosas) y algunas otras observaciones derivadas de ello, como la ética. Su sistema filosófico escrito en forma geométrica, es decir, a base de axiomas, proposiciones y pruebas, no parecía demasiado ameno de leer. No son muchas cartas pero ayudan a captar poco a poco su visión de Dios, algo que nos hace penetrar en la vida en toda su desnudez, tanto materia como pensamiento, que si bien entendido nos hace más responsables, menos ilusos, más certeros. Las cartas más interesantes son las que mantuvo con el teólogo Henry Oldenburg.
Resulta difícil entender como con los años las grandes religiones todavía en boga siguen concediendo su fe en algo tan sumamente abstracto. Supongo que es la esperanza de encontrar después de la muerte un lugar mejor donde habitar, la esperanza de no desaparecer del todo. Quizá sea ese el punto más flaco del pensamiento spinozista, (aún cuando deja abiertas las puertas a lo que la naturaleza nos plantee en su continuo transformismo) que no regala una respuesta satisfactoria sobre el porvenir de nuestra existencia. Si bien tampoco las religiones al uso lo hacen. Pero su apuesta por entender a Dios y su ética más allá del bien y del mal, su lúcido acercamiento a un Dios más comprensible le colocan en el pedestal de los mejores filósofos de la historia. Tal vez el mejor teólogo para los que persiguen respuestas aquí y no en el más allá. Ojala se le estudiara tanto como se hace con la Biblia o el Corán.

"Primero, que en el universo no pueden existir dos substancias que difieran en su esencia. Segundo, que la sustancia no puede ser creada o producida - la existencia pertenece a su actual esencia .Tercero,  que toda substancia deber ser infinita o sumamente perfecta a su manera"

 "Todos los cuerpos están rodeados por otros cuerpos, y están mutuamente determinados a existir y operar en una proporción fija y definida, mientras las relaciones entre movimiento y descanso, la suma total de ellos, es decir, en el universo entero, permanece inmutable [...] Como la naturaleza del universo no está limitada, sino que es absolutamente infinita, sus partes son por naturaleza de infinito poder, infinitamente modificadas y obligadas a experimentar infinitas variaciones. Pero, respecto a la substancia, concibo que cada parte tiene una unión intrínseca con el todo [...] En cuanto a la mente, creo que es también parte de la naturaleza, mantengo que existe en la naturaleza un infinito poder de pensamiento, que, mientras sea infinito, contiene subjetivamente el mundo entero y sus pensamientos proceden en la misma forma de la naturaleza, es decir, en la esfera de las ideas"

"Si dos cosas no tienen nada en común, una no puede ser la causa de la otra. Ya que, al no tener nada en común entre el efecto y la causa, el efecto al completo no nos llevaría a nada [...] Mantengo que Dios es un Ser que consiste en infinitos atributos, de donde cada uno es infinito o sumamente perfecto en su forma"
"Y también que Dios no tiene mano derecha o izquierda, que por Su esencia no está en un punto particular sino en todas partes, que la materia es en todas partes la misma, que Dios no se manifiesta en un imaginario espacio supuestamente fuera del mundo"
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