MARCO AURELIO  (121 - 180 DC)

Es difícil comprender como un emperador romano dedicado a las tareas políticas y marciales de un imperio guardara en sí mismo sentimientos tan profundos sobre la vida y el mundo en el que nos debatimos. Su gran honestidad, (de hecho el emperador Adriano ya le apodó cariñosamente verissimus, que podría traducirse como honesto) su visión cósmica, sensible ante la celeridad de la vida, de nuestra postura modesta con el universo, junto con su actitud frugal ante la riqueza y la ambición, han hecho de él la figura de un pensador histórico y ejemplar. Sus soliloquios en griego quedaron registrados en doce breves libros como Meditaciones, que no son sino observaciones, en axiomas, sobre las preocupaciones trascendentales que acucian al cualquier hombre cuando reflexiona en soledad. Quedaron los textos al poco extraviados y sólo siglos más tarde fueron rescatados del olvido, ya en el siglo XVI, al descubrirse en una biblioteca de Florencia. Por su resignación ante las fuerzas del destino y su virtud por transformar lo humilde en lo divino, es considerado como uno de los grandes de la filosofía estoica. Pero aún se puede ir más allá y cabría encuadrarle en otros tantos movimientos del pensamiento, desde la ética cristiana, al romanticismo, el panteísmo, el budismo, o incluso la ecología, "una sola tierra es para todos los terrestres, una sola la luz que vemos, uno solo el aire para todos los seres animados que ven y respiran" (09/8). Estadista insólito, único, del que deberían tomar nota los políticos actuales, hoy más que nunca, tan congestionados que estamos de corrupción, egoísmo y materialismo.

"Todo está entretejido mutuamente su vínculo es sagrado y casi nada es ajeno entre sí. En efecto, forma un conjunto organizado y pone orden al mismo universo, porque el universo es uno a partir de todos, dios es uno a través de todos, la substancia es una, la ley es una, la razón es común a todos los animales inteligentes, la verdad es una, si es que es una la perfección de seres del mismo género y que participan de la misma razón."

"Todo lo material desparece rápidamente en la substancia del todo, cualquier causa se remonta rápidamente a la razón del todo y el recuerdo de todo rápidamente se subsume en la eternidad."

"Desde la eternidad todas las cosas son iguales en su aspecto, se repiten circularmente y no se diferencian nada, uno verá lo mismo en cien años que en doscientos o que en un tiempo infinito. Tanto el que goza de un tiempo más largo como el que ha de morir rápidamente deja atrás lo mismo, porque sólo es el presente de lo que va a verse privado, si es eso lo único que tiene y si uno no deja atrás lo que no tiene."

"Contempla los desplazamientos de los astros como si giraras con ellos y reflexiona sobre las transformaciones mutuas y continuas de los elementos, estas representaciones nos purifican de la porquería de la vida terrestre"

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